Durante años, su carrera estuvo ligada al periodismo, pero la gastronomía siempre ejerció una atracción especial sobre ella. Fue a través de la escritura que se adentró en el mundo de la pastelería, hasta que, poco a poco, pasó de contar historias a ser parte de la creación.
Su formación la llevó por aulas prestigiosas como la escuela Hofmann, donde descubrió su amor por la panadería de la mano de su primer mentor, Roberto Juan Jaime, de la escuela de Paco Torreblanca. Más tarde, trabajó bajo la guía de David Pallas, quien no solo se convirtió en su referente, sino también en su esposo.
Entre harinas y fermentaciones, encontró su remanso de paz y descubrió que hacer pan es mucho más que una técnica: es un arte milenario que conecta con la tradición, la paciencia y la salud. Retomar los procesos de amasado lento, las fermentaciones largas y las moliendas tradicionales no solo mejora el sabor del pan, sino también su impacto en nuestro bienestar.
Su pasión por las masas la llevó a profundizar en cada detalle del proceso, más allá de las recetas, hasta especializarse en nutrición y dietoterapia. Hoy, sigue en un constante aprendizaje y, al mismo tiempo, en un camino de enseñanza, transmitiendo su conocimiento para que más personas redescubran el valor de los ingredientes naturales, las técnicas tradicionales y el placer de crear con sus propias manos alimentos que nutren tanto el cuerpo como el alma.
Y disfruta de todas nuestras novedades, ofertas y recetas gratis.